A finales de este verano, los habitantes de Astaná fueron testigos de un evento cultural que podría cambiar la percepción habitual de la poesía. En la capital tuvo lugar el estreno del teatro «Tarmaqtar», el primer teatro poético de Kazajistán. Su debut, «El tiempo es un testigo silencioso», unió la fuerza de la palabra poética y el arte teatral, ofreciendo al público no solo una obra, sino una experiencia emocional.
La obra está basada en los libros «Transmitiré amor con líneas» y «Mi lady escribió…», publicados por la editorial «Tarmaqtar». La escenificación fue preparada por el conocido director Farjad Moldagali, el director artístico del proyecto es Elaman Toleutai, y la puesta en escena fue realizada por el director Serikzhan Aitkali. En formato de drama sonoro, el espectador se sumergió en un espacio donde se entrelazan el tiempo y el amor, y los poemas de poetas kazajos cobran vida en el escenario acompañados de música.
De la página de Instagram al escenario
La historia de «Tarmaqtar» comenzó hace varios años con una página literaria en Instagram. El proyecto fue concebido como una forma de transmitir la estética de la poesía kazaja a los jóvenes, utilizando un lenguaje visual y SMM moderno. Las publicaciones con diseños llamativos encontraron rápidamente una respuesta: la audiencia creció y el interés por los poemas se intensificó.
«Empezamos a publicar extractos que tocan el corazón. Luego los reunimos en un libro, y las copias se agotaron más rápido de lo que esperábamos. Fue una señal: la gente echa de menos la poesía», dice la directora del proyecto, Rysgul Doszhan.
Los libros del proyecto se convirtieron en bestsellers, y los nuevos formatos —versiones de audio con códigos QR, veladas creativas— acercaron aún más la poesía al lector. El siguiente paso fue la creación del teatro.
La principal diferencia es el profesionalismo
Según los organizadores, el teatro de poesía no es solo una velada literaria, sino un arte escénico completo. La escenificación, la dirección, el trabajo de los actores: todo se realiza a un nivel profesional.
Un orgullo especial es el elenco. Subieron al escenario Darjan Suleimenov, Tolkyn Nurbekova, Nurzhan Asyljan, Bajytgul Serikbaeva y otros. Los espectadores están acostumbrados a verlos en el teatro y el cine, pero fue precisamente la lectura de poemas lo que reveló a los artistas desde un ángulo inesperado.
«Cuando un actor vive la poesía, es un nivel de emociones completamente diferente. El espectador no solo siente el texto, sino que lo vive junto con el personaje», señala Doszhan.
Los jóvenes como principal audiencia
Desde el principio, «Tarmaqtar» apostó por los jóvenes. Sin invitaciones oficiales ni los atributos habituales de las veladas académicas, solo un interés sincero y la energía de una nueva forma. Fueron precisamente los jóvenes quienes primero aceptaron el proyecto y lo convirtieron en un fenómeno.
Misión y planes
En varios años, «Tarmaqtar» ha publicado cuatro libros y dos diarios literarios, reuniendo a más de 200 autores. Además, en una colección aparte, «Mi lady escribió…» se incluyeron 100 obras de poetisas kazajas.
«Nuestra principal misión es popularizar la poesía. En el futuro queremos hacer que los autores reciban honorarios por las publicaciones. Ese es el siguiente paso», comparte Rysgul Doszhan.
El equipo ya está preparando una nueva producción, que esta vez abordará páginas poco conocidas de la poesía kazaja.
Un nuevo formato para la escena cultural
«Tarmaqtar» se ha convertido no solo en un experimento cultural, sino también en un fenómeno que puede marcar una nueva tradición en la vida literaria de Kazajistán. El teatro de poesía amplía los límites habituales del género, convirtiendo la lectura de poemas en una acción escénica donde el espectador se convierte en testigo de un diálogo entre el tiempo, las palabras y los sentimientos.
Y si los primeros pasos del proyecto se dieron gracias al entusiasmo y la valentía, ahora, según sus creadores, la atención principal se centrará en el profesionalismo y el desarrollo del teatro poético como una institución completa.