Se inauguró una exposición de la artista turca Melisa Ozgur en Astaná

Se inauguró una exposición de la artista turca Melisa Ozgur en Astaná

La exposición es una vívida demostración de la síntesis de prácticas espirituales, misticismo y lenguaje artístico moderno. Las obras de Melisa Ozgur, llenas de la energía del cosmos y el simbolismo de los mandalas, revelan las profundidades del mundo interior al espectador e invitan a un viaje a través de las vastas extensiones del Universo.

«Para mí, la creatividad es una forma maravillosa de autoexpresión. Desde que tengo memoria, siempre me ha encantado dibujar. Y cuando era niña, cuando no podía expresar mis pensamientos y sentimientos con palabras, tomaba una hoja de papel y un lápiz. Sin embargo, al elegir una profesión, mis padres insistieron en que eligiera algo más habitual y estable. Después de estudiar en la universidad, obtener una educación médica a su gusto, dije que ahora quiero hacer lo que me gusta. Y encontré mi camino en la creatividad. Estoy muy contenta de que mis exposiciones se estén realizando ahora fuera de Turquía y estén encontrando el reconocimiento de los espectadores», señaló Melisa Ozgur.


El motivo central en la obra de Melisa Ozgur es el mandala: una antigua imagen simbólica que refleja la infinitud del cosmos y la armonía interior del hombre. En sus obras, el mandala no se convierte simplemente en una figura geométrica, sino en un organismo vivo, que late con energía. Cada elemento del mandala es un paso en el camino hacia la armonía interior, la conciencia de su lugar en el mundo.


El color en la obra del artista juega un papel muy importante. Los tonos brillantes y saturados transmiten estados emocionales, mientras que los suaves y tenues crean una atmósfera de meditación y paz.


«Quizás hayan notado que mis obras se distinguen por la diversidad de colores. Creo que los colores aportan energía a nuestras vidas. Principalmente, utilizo varias figuras geométricas para crear simetría. Sin embargo, también se pueden encontrar elementos inesperados en las obras. Por ejemplo, peces, que para mí representan un símbolo de valentía para superar obstáculos y nadar tranquilamente en la corriente de la vida. Se puede decir que me describen a mí, mi estado de ánimo», dijo la artista.


La artista se inspira tanto en la abstracción europea como en las tradiciones místicas turcas y orientales. Su obra combina tanto tradiciones occidentales como orientales. Melisa Ozgur se esfuerza por crear no solo una imagen visual, sino un espacio para la reflexión, donde cada uno pueda encontrar su propio significado y respuesta a las preguntas eternas de la existencia.


«En los mandalas se expresa toda la pureza de este mundo. Estoy segura de que limpian a quien los mira. La exposición en Kazajstán es especialmente significativa para mí, ya que los pueblos son hermanos. Hace mucho tiempo, nuestros antepasados ​​emigraron de estas estepas y encontraron un nuevo hogar en Europa. Siento una conexión especial con Kazajstán y me alegro de que hayamos organizado una exposición aquí», compartió Melisa Ozgur.



575
03.03.2025