Hoy se conmemora el 95.º aniversario del nacimiento de Shamshi Kaldayakov, compositor cuyas canciones se han convertido en el alma de la música kazaja. Sus melodías aún resuenan en los cielos de su tierra natal, despertando los sentimientos más intensos. "Teriskei", "Otyrardagy toy", "Kogildir Kokshe", "Moyynkumda"... Estas canciones fueron amadas por el pueblo desde sus primeras notas y han perdurado en sus corazones. Cada una guarda una historia especial que ha pasado a formar parte de la memoria popular.
"Ana turaly zhyr".
La calidez, la gratitud y el amor infinito de un hijo por su madre: el compositor logró expresar todo esto en su música. Cuando el nombre de Shamshi ya resonaba en todo el país, su madre enfermó gravemente. Al enterarse, soñó con regalarle una canción eterna. Pero en el otoño de 1961, ella falleció. Entonces, basada en los poemas del letrista Gafu Kairbekov, nació una emotiva canción sobre una madre que quedó grabada para siempre en el corazón de los oyentes.
"Ak Bantik"
Ligera, tierna, llena de encanto juvenil, esta canción se convirtió en símbolo del primer amor. Un día, Karazhan Abilazimov, amigo de Shamshi, los invitó a él y al poeta Mukhtar Shakhanov a su boda. "¿Qué mejor regalo que una canción?", decidieron. Así nació la canción "Ak Bantik". El nombre le vino a la mente: la novia acababa de terminar la escuela y el día de su boda aún lucía como aquella joven con cintas blancas en el pelo.
"Dungen Kyzy"
Junto con el poeta Sabyrkhan Asanov, Shamshi viajó por la región de Zhambyl. Durante el viaje, nacieron varias canciones, entre ellas "Dungen Kyzy". En un pueblo donde vivían los dunganos, el compositor conoció a una joven belleza cuya sonrisa lo inspiró a crear esta conmovedora melodía.
"Sygan Serenadasy"
En 1963, durante un período difícil de su vida, Shamshi conoció a unas gitanas en la calle que le adivinaron la fortuna y lo invitaron a vivir en su campamento. Allí conoció a Izolda, una chica de ojos ardientes. Pasaron varios meses juntos, pero pronto el campamento se trasladó a Tayikistán. Al despedirla, Shamshi vio lágrimas en sus ojos y sintió como si le hubieran arrebatado el corazón. La melodía de "Sygan Serenadasy" le llegó en ese preciso instante.
"Tamdy Arui"
Por invitación de la respetada figura pública Kani Amandykov, Shamshi visitó la región de Tamdy en Uzbekistán, un lugar donde la lengua, las tradiciones y las canciones kazajas se han conservado cuidadosamente durante siglos. Los residentes lo recibieron con calidez y respeto, celebraron reuniones, cantaron, bailaron y compartieron historias. En la fiesta de despedida, al ver los rostros radiantes de la gente, el compositor prometió: «Escribiré una canción para ustedes: «Tamdy aruy». Y cumplió su palabra.