El Kui que unió a miles: cómo los dombrakasianos entraron en el Libro Guinness de los Récords y qué significa para la etnocultura

El Kui que unió a miles: cómo los dombrakasianos entraron en el Libro Guinness de los Récords y qué significa para la etnocultura

En julio de 2025, en Taldykorgan tuvo lugar un evento que entró en la historia mundial: más de 5 mil dombristas interpretaron el legendario kui "Balbyrauyn", estableciendo un nuevo récord Guinness. Este flashmob a gran escala no solo se convirtió en un logro, sino también en un poderoso símbolo del código cultural de Kazajistán.

Es gratificante que la dombra se haya convertido en un portador vivo de la historia, la filosofía y la espiritualidad kazajas. A través de los kui (piezas instrumentales) se transmiten no solo melodías, sino también emociones, leyendas, imágenes de estepas y batallas heroicas. En cada sonido escuchamos la huella de nuestros antepasados y sentimos el símbolo nacional.

Durante siglos, la dombra fue compañera de nómadas, akyns, bayes, guerreros y narradores. No necesita traducción, porque habla el idioma del alma. Y cuando miles de manos tocan las cuerdas simultáneamente, se convierte en un acto no solo de tocar, sino de unidad nacional.

Récord histórico en Taldykorgan

La interpretación masiva del kui "Balbyrauyn" se convirtió en la culminación de un proyecto cultural republicano que unió a personas de diferentes edades, profesiones y regiones. En el evento participaron tanto escolares como músicos profesionales, así como aficionados, desde jóvenes hasta mayores.

Los organizadores realizaron previamente capacitación en línea y fuera de línea para que cada participante pudiera prepararse. El día de la interpretación, más de 5 000 dombristas se reunieron en un solo lugar y, bajo la dirección de un director de orquesta, interpretaron la obra sincrónicamente. Representantes del Libro Guinness de los Récords registraron el resultado como la interpretación más masiva de kui en dombra en la historia de la humanidad.

Este récord no solo se convirtió en un motivo de relaciones públicas, sino también en un importante impulso para la popularización del arte tradicional. Demostró que la música nacional no es algo anticuado, de archivo, sino una parte viva del presente.

Cabe destacar que después del flashmob, el interés de los jóvenes por aprender a tocar la dombra aumentó considerablemente, y los videos de ensayos y actuaciones se volvieron virales en las redes sociales.

"Tenemos una oportunidad única de darnos a conocer a nosotros mismos y a la cultura kazaja, fortalecer la identidad nacional. En las condiciones de la globalización, es importante tener marcadores culturales estables, y la dombra es precisamente ese símbolo", señalan los organizadores del flashmob.

Gracias a la participación de los medios de comunicación extranjeros y a la amplia resonancia, todo el mundo conoció la dombra kazaja.

El Ministerio de Cultura e Información de la República de Kazajistán ya ha anunciado planes para celebrar anualmente el Día Nacional de la Dombrá en formato de actuaciones masivas, clases magistrales, festivales y programas educativos. También se está debatiendo en el país la introducción de clases obligatorias de dombra en las escuelas, como parte de la preservación del patrimonio cultural inmaterial.

La inclusión de los dombristas kazajos en el Libro Guinness de los Récords no es solo una cifra y no solo un éxito en la arena mundial. Es una confirmación de que las tradiciones están vivas, que los jóvenes están dispuestos a aceptarlas y desarrollarlas, y que el arte de la dombra es capaz de unir a la nación.

244
19.07.2025