En Kazajistán existen numerosas representaciones de este famoso ballet, pero la versión de Yuri Grigoróvich es la que se considera un modelo. Sigue siendo la encarnación del arte elevado, al que aspiran los verdaderos amantes de los clásicos. La compañía de ballet del teatro "Astana Opera", dirigida por la estrella del ballet mundial Altynai Asylmuratova, es famosa desde hace mucho tiempo por su profesionalidad no solo en el país, sino también en el extranjero. No es de extrañar que el colectivo haya sido invitado en repetidas ocasiones a actuar con esta obra en el escenario de la "Ópera de Dubái", donde la obra siempre ha cosechado críticas entusiastas del público.

Aunque las fiestas de Año Nuevo ya han quedado atrás, el interés del público kazajo por este ballet no decae. La escenografía y el vestuario, recién llegados de los calurosos Emiratos, volverán a adornar el escenario del teatro de la capital, brindando al público la oportunidad de prolongar el ambiente festivo.

El vestuario y la escenografía, diseñados por el destacado escenógrafo Simón Virsaladze, confieren a la producción un ambiente realmente mágico. Los colores brillantes, los detalles interesantes y el simbolismo transforman el espectáculo en un auténtico cuento de hadas invernal.

El público podrá disfrutar de la maestría de los solistas de "Astana Opera". En diferentes días, subirán al escenario los artistas de honor de Kazajistán Aigerim Beketaeva, Baktiyar Adamzhan y Erkin Rakhmatullaev. Los jóvenes artistas, galardonados en concursos internacionales, Shugyla Adephan, Sofia Adilhanova, Dias Kurmangazy, así como los artistas del cuerpo de ballet, también demostrarán su talento.

"Esta producción está creada en las mejores tradiciones del ballet clásico, probablemente por eso es tan querida en todo el mundo. La reciente gira por Dubái nos brindó experiencia, emociones positivas, fue interesante ver cómo el público en otro país experimenta y admira esta historia. Pero volver a casa e interpretarla ante el público kazajo siempre es particularmente emocionante: nuestro público siente con el corazón, puede empezar a aplaudir en cuanto se entusiasma con una u otra escena, y esto te da energía para toda la función", - dijo Sofía Adiljanova.