
Recientemente, en Ámsterdam se inauguró la exposición de la Unión de Museos de la ciudad de Almatý titulada "Continuidad de las tradiciones: legado de los antepasados" — un ambicioso proyecto cultural que presentó al público europeo la historia, la música y el arte de Kazajistán.
En la ceremonia de apertura participaron representantes del cuerpo diplomático, líderes de organizaciones internacionales y sociales, figuras del ámbito cultural y artístico, así como representantes de los medios de comunicación.
Este evento representó un paso importante para fortalecer los lazos culturales entre Kazajistán y los Países Bajos, además de ser una excelente oportunidad para presentar al público europeo el rico patrimonio y el arte contemporáneo de Almatý. La redacción de Qazaq Culture obtuvo un comentario de Lyazzat Kudaybergen, directora de la entidad estatal "Unión de Museos de la ciudad de Almatý", sobre cómo exposiciones de este nivel ayudan a ampliar la percepción de Kazajistán como destino turístico y si habrá nuevas exhibiciones internacionales en el futuro.
Lyazzat, el desarrollo de relaciones internacionales es una dirección importante de su trabajo. ¿Cómo surgió la idea de presentar la colección de los museos de Almatý en Ámsterdam?
En los últimos tres años, hemos firmado 19 memorandos de cooperación con organizaciones internacionales y realizado 12 grandes exposiciones en países como Corea del Sur (Seúl), Francia (París), Austria (Viena), Italia (Nápoles), República Checa (Praga), Serbia (Belgrado), Hungría (Karcag), Turquía (Estambul) y finalmente en el Reino de los Países Bajos — Ámsterdam.
La exposición en Ámsterdam fue la continuación lógica de este trabajo sistemático dirigido a activar la actividad internacional de exhibiciones y ampliar la cooperación cultural. No solo buscamos mostrar piezas museísticas, sino crear un espacio cultural vivo donde las tradiciones y la modernidad de Kazajistán se perciban en el contexto del diálogo global.
Este proyecto adquirió especial importancia gracias al apoyo de la administración de la ciudad de Almatý, el Instituto Yunus Emre en los Países Bajos y la Embajada de la República de Kazajistán en los Países Bajos. Gracias a esfuerzos conjuntos, logramos realizar la exposición "Dәstүr zhalğastığı: Babalar amanaty" — "Continuidad de las tradiciones: legado de los antepasados".
Esta exposición no solo presenta al público europeo los trajes nacionales, objetos domésticos, artes decorativas y artefactos, sino que también transmite la filosofía de la cultura kazaja, su armonía interna entre pasado y futuro. A través del arte mostramos que las tradiciones no son historia estática, sino un código vivo de identidad que sigue desarrollándose y uniendo generaciones.
Por lo tanto, la idea de la exposición en Ámsterdam no solo fue resultado de la cooperación internacional, sino también una expresión del deseo de Almatý de convertirse en un puente cultural entre Oriente y Occidente, entre tradiciones ancestrales y arte contemporáneo.
¿Cuál fue el punto de partida para la cooperación internacional en el marco de esta exposición?
En los últimos años, Almatý se ha consolidado como uno de los centros de diplomacia museística de Kazajistán. La experiencia de realizar exposiciones en la sede de la UNESCO en París, así como en los principales museos de Corea del Sur, Italia, Austria, Turquía, Hungría y otros países, ha permitido formar no solo vínculos profesionales sino también confianza mutua entre instituciones culturales de diferentes estados. Estos proyectos demostraron que el arte y el patrimonio kazajos generan un interés genuino en la audiencia internacional.
Así, la exposición "Dәstүr zhalğastığı: Babalar amanaty" en Ámsterdam fue la continuación natural de esta estrategia internacional ya establecida. Combinó la experiencia de iniciativas previas y abrió una nueva etapa de cooperación, con un énfasis desplazado desde la mera exhibición del arte nacional hacia un diálogo intercultural profundo.
Se puede decir que la experiencia acumulada, los contactos profesionales y el reconocimiento de la escuela museística kazaja en la arena internacional fueron el punto de partida que permitió llevar a cabo este proyecto. La exposición en Ámsterdam no es solo un evento cultural, sino un símbolo de madurez y apertura de la diplomacia museística kazaja, donde el arte se convierte en un lenguaje de entendimiento entre los pueblos.
¿Qué importancia tiene para Almatý participar en un proyecto de este tipo en la arena internacional?
La exposición en Ámsterdam no es solo un intercambio de exposiciones. Es una oportunidad para declarar el potencial creativo y espiritual de Almatý, presentar un legado único en el contexto de la cultura mundial y demostrar que Kazajistán es un país donde las tradiciones se combinan armoniosamente con la modernidad.
Además, estos proyectos contribuyen al desarrollo de relaciones internacionales entre museos, investigadores, artistas y curadores, abriendo nuevos formatos de cooperación. Para Almatý, esto significa expandir su presencia cultural en el extranjero, fortalecer el estatus de la ciudad como punto de atracción para iniciativas culturales y formar una imagen positiva del país en general.
Por lo tanto, participar en exposiciones internacionales no es solo prestigio, sino también una contribución al desarrollo de la diplomacia cultural de Kazajistán, donde Almatý actúa como embajador de la identidad nacional, uniendo Oriente y Occidente a través del lenguaje del arte.
¿Se puede decir que esto es un paso para posicionar la ciudad como centro cultural de Kazajistán y Asia Central?
¿Qué museos específicos de Almatý forman parte de la Unión de Museos y presentaron sus exhibiciones en el extranjero?
¿Cuál fue el objetivo principal de la exposición "Continuidad de las tradiciones: legado de los antepasados"?
El proyecto "Continuidad de las tradiciones: legado de los antepasados" buscó mostrar que la cultura kazaja es un sistema integral de símbolos, formas y significados que revelan la historia espiritual del pueblo. La exposición combinó artefactos auténticos, objetos domésticos, joyas, elementos del vestido nacional, artes decorativas y aplicaciones, así como interpretaciones modernas de motivos tradicionales.
¿Qué querían transmitir al público europeo a través del patrimonio cultural kazajo?
¿Qué respuestas recibieron de los visitantes y organizadores en los Países Bajos?
¿Los especialistas europeos mostraron interés en las tradiciones y artesanías kazajas?
¿Qué símbolos o artefactos fueron centrales en la exposición y causaron mayor impresión en el público extranjero?
¿Se planean exposiciones similares en otros países europeos?