Abdizhəmil Nurpeyisov

Abdizhuddlemil Nurpeyisov: destacado escritor, traductor y figura pública kazaja que dejó una profunda huella en la literatura de Kazajstán. Nacido el 22 de octubre de 1924 en la región de Kyzylorda, en el pequeño pueblo de Ushkon. Desde pequeño absorbió las tradiciones de la cultura kazaja, lo que se reflejó en su creatividad.

Durante la Gran Guerra Patria, luchó en el frente, uniéndose a las filas del PCUS(b) en 1943. La experiencia de la guerra tuvo una enorme influencia en su obra. Su carrera literaria comenzó con la novela "Courland", posteriormente revisada y publicada con el título "Sangre y sudor", una epopeya sobre la vida del pueblo kazajo durante las crisis sociales.

En el año 2000, Nurpeisov publicó una novela dilógica “La última deuda” que aborda el grave problema medioambiental del mar de Aral. Este trabajo recibió un amplio reconocimiento y fue galardonado con el Premio Sholokhov en 2003. Los libros del escritor han sido traducidos a muchos idiomas, incluidos francés, alemán, español, chino y árabe, lo que indica su reconocimiento internacional.

Junto con sus escritos En sus actividades, Nurpeisov era un traductor talentoso. Adaptó las obras de Anton Chejov, Maxim Gorky, así como las obras del dramaturgo español Alejandro Casona y el poeta turco Nazim Hikmet.

En tiempos de mercado, se convirtió en el fundador del PEN Club internacional kazajo y durante muchos años siguió siendo su presidente, promoviendo el desarrollo de la literatura kazaja en el extranjero. Bajo su liderazgo, se publicó la revista literaria y social “Tan-Sholpan”, que se convirtió en una importante plataforma para los escritores kazajos modernos.

Por su destacado trabajo, Nurpeisov recibió numerosos premios, incluido el título de Escritor del Pueblo de la República Socialista Soviética de Kazajstán (1985), Premio Estatal de la URSS (1974) y el premio más alto del país: el título de Héroe del Trabajo de Kazajstán (2019).

Abdijamil Nurpeisov falleció el 5 de febrero de 2022. Dejó atrás no solo una rica herencia literaria, sino también un ejemplo de devoción infinita al arte de la palabra.