Nurgisa Tlendiev

Nurgisa Tlendiev – no es sólo un nombre en la historia de la música kazaja, es una era que suena en dombra, orquesta y los corazones del pueblo. Compositor, director de orquesta, intérprete de dombra, héroe del pueblo de Kazajstán y artista del pueblo de la URSS: era un hombre que sabía cómo hablar con el universo a través de la música.

Nació en 1925 en el pueblo de Shilikemer y desde pequeño su destino quedó sellado: su padre le enseñó a tocar la dombra y el gran Akhmet. Zhubanov lo tomó bajo su protección. Ya a la edad de 12 años, Tlendiev era acompañante y, a los 14, director de una orquesta de instrumentos populares.

La guerra no terminó perdónalo tampoco: fue al frente como voluntario. Pero, habiendo pasado por fuegos y pruebas, volvió a dedicarse nuevamente a la música. Estudió en el Conservatorio de Kazajstán, luego en Moscú y se formó en el Teatro Bolshoi.

Su trabajo abarca más más de 500 obras, desde temas hasta óperas, desde cantatas hasta sinfonías. Su música se escucha en películas que todo kazajo conoce: “Kyz Zhibek”, “Mi nombre es Kozha”, “Batyr Bayan”.

En 1981 fundó la legendaria orquesta "Otrar Sazy", devolviendo al mundo los antiguos instrumentos kazajos, reviviendo los sonidos de la estepa y los nómadas. antepasados. Llevó la música kazaja a un nuevo nivel, creando un puente entre el pasado y el futuro.

El 15 de octubre de 1998 falleció, pero su dombra sigue sonando en las orquestas, en las voces de cantantes folclóricos, en la memoria de todos los que alguna vez han escuchado sus obras.